jueves, 28 de mayo de 2015

Casi 60.

Este post va bastante pasado de fecha, pero confío que a uds. les dará mas que igual, entonces le seguimos.

Este mes es bastante ajetreado en lo que respecta a tiempo, porque se junta el cumpleaños de mis padres. Mamá lo celebra primero y 5 días después Papá cumple el suyo.

Hoy haremos referencia a mi padre, pues esta aprovechando sus últimos 365 días antes de saltar a las 6 décadas de vida.

Él es siempre de tirar la casa por la ventana e invitar a toda y cuanta gente recuerda conocer. Y es este aspecto el que más nos (aclaremos que no era la única) molestaba año tras año y en especial en mi tierna jodida juventud.
Rabiaba solo de saber que ya era Mayo, mientras las tareas de los preparativos se iban acumulando y acumulando sin verse donde acababan.

Continuando les dejo un pequeño recorte de mis años adolescentes -obviamente editado, porque a esa edad escribía pura vulgaridad que podría dañar permanentemente su retina y no deseo cargar con la culpa- que extrañamente ya no comparto, pues es también gracias a Papá que aprendí que lo único que cuenta es esta vida, que de nada te valdrá el mejor ramo de flores y/o arreglos si es para una tumba que indica que tu cuerpo es alimento de gusanos 5 metros abajo. Papá lo entendió desde joven, pues perdió a su madre siendo aún menor de edad; eh allí que busca compartir y acumular compulsiva-mente alegres recuerdos de fechas especiales en esta vida, porqué un muerto no sabe ver. ¡Feliz cumpleaños Papá!:



A mi queridísimo Padre:

¡Feliz cumpleaños Papá!. 

No soy mucho de escribir cartas como esta, pero es el único medio para comunicarte mis pensamientos sin que estalles en enojos y/o gritos. Primero pido tu paciencia y tranquilidad para continuar leyendo (estudios indican que llamar a estos estados tiende a alterar aún mas a las personas, por favor dime que no es tu caso).
Papá, es un nuevo año y es Mayo otra vez, y pensaba si tal vez, por alguna mágica coincidencia del destino, decidieras no realizar tus acostumbradas fiestas con motivo de tu onomástico y el de mamá. No deseo que te enojes ni pierdas el control prontamente por lo que fundamentaré mi petición así:

1. Con el dinero gastado invertido en dicha celebración, fácilmente puedes comprarte algún nuevo aparato tecnológico ultra moderno, de esos que tanto te gustan y que tiendes a acumular en tu habitación.
2. Con el tiempo invertido en los preparativo para la fiesta, puedes tranquilamente terminar alguno de los proyectos que tienes pendiente por varias partes de la casa: quizás puedas arreglar el picaporte del baño del segundo piso, como para dejar de poner alguna tranca y tener baños calmos y pacíficos -sin miedo a que alguien entre de improviso y te pesque jabonando partes sucias, muy sucias-.
3. Con la ahorrada de ingesta de alcohol y comida, no tendrás que padecer las dietas en las que mamá suele ponerte, esas en las que en vez de alimentarte parece que diera de comer a un conejo con esbozos vacunos. No busco ofenderte solo enfrentarte a la cruda difícil y jodida realidad.

Espero que mis argumentos hayan sido lo bastante poderosos para justificar la suspensión parcial casi total de este tipo de celebraciones. Eso llenaría de júbilo a gran parte de músculos, hígados, cerebros y billeteras implicadas al caso.

Medítelo profundamente con la almohada -y agua de azhar-, quedo de ud. esperando una próxima misiva.


Atentamente,

Su adorada Mary.




*(Y uds. creyendo que tenían los peores hijos del mundo, ¡bahhh!.)



domingo, 24 de mayo de 2015

Sin titulo.

Adios celular, fuiste un buen amigo mientras duró. Tus caídas fueron las mías, tus bloqueos fueron los mios y así.

Adios laptop. Nunca entenderé aquella tarde en la cual tu fuente de poder simplemente decidio abandonarnos para no regresar.

Adios, adios, y ¡hola Tablet -robada-!.

FIN.

miércoles, 13 de mayo de 2015

Conversaciones en paralización.

Marita y Mary:
- ¿Mary como está el paro?, ¿te has enterado de alguna novedad?.
- A la hora que me regresé las tiendas estaban medio abiertas - medio cerradas. Los que estaban preocupados eran los choferes, que se llamaban como locos para ver si a alguno tenía novedades sobre algún bloqueo. Conclusión a boca de buen transportista: "Todo tranqui hermanito".

- ¿Mary dice que ya están marchando hasta el centro?.
- Prendo la radio y te aviso.
- Ok.

- ¿Y Mary te enteraste de algo?.
- Ya regresó mi madre y dice que todo está bloqueado.
- ¿De verás?.
- Sí,  te manda la bendición para que almuerces lo que encuentres en tu puesto favorito: La tía Veneno Restaurante. Difícil que algun auto te traiga a casa a esas horas. Amén.
- Jajajaja, ¡Carajo Mary, no digas payasadas!.
- Dicen que se va a poner peor por lo que recomiendo que compres tu periódico del día y te quedes a dormir en el parque que alcances, nos vemos mañana, ¡Te cuidas :)!.
- Jajajaja, ¡Mary, porque no me dices directamente que no quieres cocinar y te ahorras la indirecta!.
- Ok. No quiero cocinar.
- Jajajajaja. Te amo.
- (Citando la respuesta de Han Solo a Princesa Leia) Lo sé.
- ¡Jajajaja!.

martes, 12 de mayo de 2015

V I D E I T O S.

Yo le entro a los boleritos. :)

Nosé ni como, ni cuando, solo recuerdo que me gustan y que ocupan una cuantas carpetas en mi playlist.
Mi cantante favorito es José Feliciano, desde joven admiraba lo diestro que es con la guitarra y con su voz, pero sobre todo que siendo invidente lograra desarrollar una buena carrera musical. 

Su voz no será la misma que años atrás y es quizás lo que mas le reprocharía, que no la haya conservado como era debido, pero eso no quita que admire su talento después de todo.

Estuve muy cerca de asistir a uno de sus conciertos hace un par de años en Arequipa, pero por errores del destino no alcance a comprar entradas para la presentación. Y bueno, me quede sorbiendo mocos en la puerta del coliseo, pero ya fue superado. Prueba de eso, es que sus canciones son de mis predilectas para tararear en mis baños matutinos, sino pregúntenle a Marita -mi-hermana- que ya esta podrida con ese mix de tonadas -¡Sí!, hasta me doy el lujo de armar un mix bien bonito para animarme la mañana-.

Los dejo con dos temas populachones, para acompañar vuestra Hora del Lonchecito:

*Linda intro.

*Hubo un tiempo donde se me pegó la manía 
de seguir el ritmo de sus canciones con la cabeza :).

lunes, 11 de mayo de 2015

Aguante.

¿Cuántas veces más voy a ordenar este desorden?.

¿Cuántas veces más voy a ir a ese hospital?.

¿Cuántas veces más voy a rodar sobre mi cama?.

¿Cuántas veces más?.

Sigo aguantando, sigo esperando el sonar de ese celular, aguanto otro día más pero debo tener un límite. ¡Señor prométeme que tengo un ĺímite!, porque a este paso parece que nunca me fuera a colmar, que puedo mantenerme esperando eternamente.

Sigo aguantando y parezco tan bien sujetada, inamovible por una eternidad.
¿Y si me suelto?, Si me suelto me voy a ir al carajo, y yo en los caminos no se regresar.

Sigo aguantando aferrandome fuertemente pero ¿a qué?.

Sigo aguantando, esperando por ese ínfimo rayo de luz que me aclare todo, ese lento rayo de luz que parece que en vez de caminar, gatea en mi dirección.

Sigo aguantando mientras le grito a la vida si puede tratarme peor. Eso sí lo escucha, y me manda una nube gris de compañia, mira si seré pendeja.

Sigo aguantando, dando vueltas por caminos que me regresan al mismo sitio, como si de partida no mereciera ninguna oportunidad.

Sigo aguantando igual que ayer y hoy, y aunque mi corazón desesperadamente No lo quiera, aguantaré -quizás-tal-vez-y-muy-probable-y-tristemente- igual que mañana.

Aguantado, siempre aguantando.

viernes, 8 de mayo de 2015

Radio Mamá

Buenos dias estimados oyentes ¿qué tal amanecieron hoy?, esperamos que de un buen humor así como nosotros.
En el programa de hoy no podemos dejar pasar de lado una ocasión tan especial de como la celebración del día de la madre.
Este domingo todos nos detendremos para reconocer el admirable trabajo que significa ser una madre dentro de una sociedad tan acelerada como lo es la nuestra.
Este domingo llenaremos de cariño y amor a aquel ser tan bondadoso y especial que nos trajo a la vida y sacrifico sus días para poder sacarnos adelante con mucho sudor y padecimiento, posponiendo incluso sus deseos para bienestar nuestro. Esa madre que siempre tendrá una mirada de amor para nosotros en nuestros peores y mejores momentos, ese es el amor de madre.

Y aunque un día al año no sea suficiente para reconocerle tanto trabajo, sirve como recuerdo para muchos de nosotros que perdidos en nuestra rutina, pasamos hasta desapercibida su existencia y no valoramos lo mucho que hacen por nosotros.

Así que hoy como motivo de agradecimiento se abren nuestros teléfonos para que puedan contarnos pequeñas anécdotas de como sus madres corregían su comportamiento.

Por ejemplo les contaré que mi madre escondía mis juguetes hasta que dejara de llorar o hacer la pataleta frente a los invitados, y ya cuando me calmaba me los entregaba con la respectiva reprimenda: "La próxima vez no te los devuelvo y se los regalo al vecino", por eso nunca me agradaron los vecinos, jajaja.

No dejen de llamarnos amigos, para contarnos sus historias y recordar juntos nuestra traviesa niñez. Y ya tenemos nuestra primera llamada al aire:

- ¡Hola Maria! ¿Cómo estas?.
- Hola, bien, llamaba para contar como era mi madre de pequeña.
- Bien María y ¿cuántos  años tienes?.
- Tengo 54.
- ¿Y tu madre aún esta contigo?.
- No, el señor ya se la llevo hace 6 años.
- Ok María, entonces cuentanos tu historia para poder recordarla juntos.
- Sí, mi madre era de las que criaba a la antigua, ella nunca nos aguanto malcriadeces ni cosas por el estilo, ella era bien estricta y siempre tenia su regla de madera para darnos un buen palmazo en donde cayera. Un día que me pase de traviesa, agarro y me dio tan duro con el palo que me rompió la cabeza, me saco mucha... harta sangre y hasta ahora tengo las cocidas de los puntos a un lado de la cabeza, sí pues, asi era mi mamacita.
- ¡Ok!!, ok María, gracias por llamar y bueno.... asi eran las mamas de esos días, claro que ahora ya no es lo mismo y hay que saber comprenderlas que nos corregian para ser mejores personas ¿no?.
Me dicen que ya tenemos otra llamada. Hola Miguel, ¿que tal?, ¿tu que historia nos vas a contar?.
- Hola!, yo les iba a contar como me castigaba mi mamá de chiquito, ella también era bien renegona y una vez me dio una cachetada tan fuerte que me termino afectando la retina, y es un problema con el que sufro hasta ahora, jeje no miro bien con un ojo, pero igual le afradezco haberme hecho el hombre que soy.
- ¡Ok Miguel!... bueno parece que las madres de nuestros oyentes eran bastantes estrictas. ¿Y tú, también tenías una mamá asi?, no dejes de llamarnos después del corte para contarnos tu historia.

Entonces corrí a abrazar a mi madre a su cuarto y agradecí mientras ella me miraba extrañada:
- ¿Qué tienes Mary?.
- ¡Gracias por no quererme tanto!.
- ¡¿Cómo?!!!.
- ¡Gracias por no quererme tanto!.

lunes, 4 de mayo de 2015

Flashback.

Tengo la tendencia a completar las cosas que dejo pendientes, normalmente no me gusta posponerlas bastante tiempo. Terminarlas me llena de satisfacción y me la paso imitando a un Joker, con una sonrisa exagerada en el rostro: bien rara eres Mary.

Hoy, al caer la marea de adrenalina típica, me dejo unos cuantos flashbacks que pensaba enterrados, como intentando combinarlos con efectos adormecedores.

*Fashback que me hacen recordarte justo ahora que soy tan feliz.

Recuerdo como planeamos realizar estas cosas juntos, y como mi cabeza ideo la manera en la que sucedería todo y lo bien que resultaría.

Hoy me fue tan bien que aún tengo la sonrisa de idiota en la cara, pero no puedo compararlo con lo que recrearon mis neuronas y se siente un llama de nostalgia dentro. ¿Porqué?, por qué lo que mi cabeza armo nunca sucedió y no hay manera en que pueda adivinar si iría a ser mejor o peor de lo que fue (nunca igual), es imposible, no va.

*Jodidos flashbacks que se me resecan la garganta y me arrastran a la perdición.


El vecino de enfrente te extraña, y también se alucina megáfono: le subió todo el volumen a la emisora romántica de turno y comenzó a sorberse los mocos.

Sacudo la cabeza, porque no necesito volver a esto. Ya estaba conviviendo feliz con él hecho de que fue culpa mía y que no iba a mover un dedo para arreglarlo, porqué no quiero un pasado que nunca debió existir.

*¿Entonces que hago con mi complejo de culpa?. ¿Alguna idea de como asesinar flashbacks de manera atroz y desalmada?.


Shhh.

¿Oyen?.

¿No oyen a un gato chillando a lo lejos?.

¡Soy yo!, estoy maullando para hacerle competencia a la emisora del vecino, ¿me acompañan?: 


*¡Dale PLAY, que nuestro canto mata demonios disfrazados de culpas!. ;)

domingo, 3 de mayo de 2015

Mary's Kitchen by Mom.

Me levanto y bajo a la cocina a desayunar, porque el desayuno es el alimento mas importante del día y blah, blah, y mas blah a la enésima potencia. Ya hija, desayunas nomás, desayuna.

Estoy partiendo el pan para hacerme un emparedado de las sobras del refrigerador - y entre pedazos de animales muertos, productos embolsados - encuentro un embutido y queso. No se ve mal.

Mamá quiere mantequilla pero solo hay Nutella. 

Arma un par de panes con Nutella luego de escarbar lo ultimo que había en el frasco -casi puedo ver partículas de sílice sobre las rodajas de pan pero no digo nada-.

Mete los panes al microondas para calentarlos y toma rumbo a la tienda por su mantequilla.

- Mary cuando suene el microondas, lo apagas porfavor.
- Ok mamá. - y procedo a embutirme mi pan con gran deleite. Mis jugos gástrico empiezan a agradecerme por su vital alimento y se están uniendo todas las bacterias que hacen que todo funcione ahí adentro, cuando mi nariz siente que algo puede estar quemandose. 

Tengo hambre (pues ayer no cené mas que un jugo) entonces sigo comiendo tranquila.

No pasa nada y asiento mientras tomo un sorbo del vaso.

Minutos depues el olor es bastante perceptible por lo que me convierto en can (y muevo el rabito, jaja, ok eso no) y empiezo a seguir el olor por la cocina. Viene del microondas que tiene contando casi siete minutos. Lo apago inmediatamente y pienso sí hoy a Mamá se le apetecía un trozo de carbón acompañado con leche.

Retiro el plato y para mi sorpresa no está quemado solo dorado, bastante dorado y seco.
Lo observo, me encojo los hombros:
- ¡Probaremos!.- Están crujientes y calientes, pero no saben mal. Es algo parecido a una tostada con cobertura de chocolate encima.

¡Mamá nos vamos a hacer millonarias!. Con tanta gente adicta a la chocolatina y a los panes, ya lo hemos logrado. Me vuelvo a sentar y pienso en el color del coche del año que podemos estar comprándonos. Vamos a nadar en millones, gracias Mamá, siempre supe que mis dones culinarios provienen de tu lado de la familia. ;)


No se pierda nuestro próximo capítulo donde le enseñaremos como probar las cosas calientes sin matar sus papilas gustativas en el intento. No olvide que aquí amamos a los radicales libres,¡hell yeah!.

P.D.: *Compre su cuadernito de apuntes pues, uno con florecitas en la portada, ¿si?.